martes, 31 de marzo de 2020

De cerca: Martin Valjent.



- Llegó a España hace dos años procedente del fútbol italiano, donde adquirió gran experiencia en la segunda división con equipos como el Ternana y Chievo. Entró a formar parte de un Mallorca que alcanzó el ascenso a la categoría máxima española de forma sorprendente, lo que le permitió conocer las exigencias de la Liga Española.

Como internacional solamente cuenta con tres apariciones para el primer equipo de Eslovaquia, aunque ya anteriormente había jugado para las demás secciones menores, en las que el joven defensor despuntó de forma sobresaliente.

Martin Valjent es un poderoso defensa central de 1´87 centímetros de estatura. En sus primeros contactos con el fútbol debió jugar más adelantado o como pivote defensivo, pero se labró un gran provenir actuando en el eje de la zaga, en la que destaca por su presencia, buen hacer y entrega total en cada partido.
Nació en Dubnica nad Váhom (Eslovaquia), el 11 de diciembre de 1995. Dio sus primeros pasos como futbolista en su ciudad natal, ingresando muy joven en las filas del F.K. Dubnica, donde tendría brillantes progresos.

Debutó como profesional a lo largo del ejercicio 2012\13, ganándose rápidamente la confianza de su entrenador, que durante aquella campaña le utilizaría en catorce ocasiones, en las que el joven zaguero mostró una seguridad atípica de un jugador de su edad.

Comenzarían a llegar interesantes ofertas por la nueva perla eslovaca, que en el verano de 2013 pondría rumbo a Italia para incorporarse al Ternana, cuyos ojeadores habían seguido sus evoluciones en la primera división eslovaca.
Pronto se amoldó a la competición italiana, destacando en la Serie B y dejando muy buena impresión en sus primeros avances con el conjunto de Libero Liberati. Mientras, el defensor de Dubnica iba creciendo con los equipos menores de la selección eslovaca, lo que le otorgaría una gran fama.

En el Ternana pasaría cuatro años muy bien aprovechados, disputando un centenar de partidos en los que además dejó sus primeros goles en la categoría de plata italiana. Con tal rendimiento, el eslovaco llamaría la atención de los clubes más importantes del país transalpino, así como muchos otros extranjeros.

Pero Valjent seguiría en el país de la bota, siendo fichado por el Calcio Chievo Verona en agosto de 2017. No obstante, los directores de la entidad de Marcantonio Bentegodi decidirían dejar al jugador un año cedido en el Ternana.
En vista de que nunca contaría para el Chievo, Valjent comenzaría a pensar en otras metas, aceptando el reto de marcharse a España para fichar por el Real Mallorca, por el que firmó contrato en el verano de 2018.

Valjent aterrizó en España para probar suerte en su segundo novel, en el que un recién ascendido Mallorca trataría de sobrevivir sin evitar pensar en un futuro retorno a la división de oro, aquella en la que ya competió hasta no hace mucho.

El eslovaco debutaría para el conjunto balear un 31 de agosto de 2018, poco después de haber sido presentado por el club. Actuó como titular en una derrota por la mínima en Alcorcón (1-0), dejando aún así muy buenas sensaciones que le permitirían hacerse con la titularidad a las órdenes de Vicente Moreno.

Martin Valjent ya ha disputado tres encuentros con el primer equipo eslovaco.

- A día de hoy, con la competición parada a causa de la crisis del Coronavirus, Valjent compite en Primera División con el equipo mallorquinista, una categoría de máximo nivel en la que lleva ya 27 partidos.

Posee una amplia experiencia como jugador internacional, al menos en lo que se refiere a los niveles juveniles. Martin Debutó en 2018 para el primer equipo de Eslovaquia, en un amistoso celebrado en Ginebra frente a la selección de Marruecos, partido en el que los magrebíes se impusieron por 2-1. Por el momento, el de Dubnica lleva tres partidos con el equipo absoluto.

sábado, 28 de marzo de 2020

¿Te acuerdas de Adolf Scherer?



- No tuvo oportunidades en el Mundial de Suecia, aunque sí fue gran protagonista en el Mundial de Chile 1962, en el que llegó a marcar tres goles en seis partidos para que su selección alcanzase la final del campeonato. Pese a que Brasil fue ganador, el combinado checoslovaco dejó una brillante actuación como subcampeón.
También concursó en la Eurocopa de Francia 1960 en la que su selección volvería a causar gran sensación al marcharse del torneo en tercer lugar. Sin duda, fue la mejor versión de Checoslovaquia en toda su historia.

Adolf Scherer fue el gran goleador de aquellos tiempos, en los que nuestro protagonista jugaba rodeado de los Ladislav Novák, Jozef Adamec, Ján Popluhár y Josef Masopust, el Balón de Oro checoslovaco.

A Scherer se le conocía como "Tcheck", de la misma manera que se le llegó a conocer a su hijo Rudolf, quien también se ha dedicado al fútbol de manera profesional. Sin embargo no fue fácil emular a su padre, un reconocido delantero de buena fama internacional.
Nació el 5 de mayo de 1938 en la ciudad eslovaca de Priekopa, aunque es de ascendencia alemana, como bien nos indica su nombre. No obstante, su familia abandonó la zona de los Cárpatos para instalarse en la desaparecida Checoslovaquia, donde Adolf iniciaría su carrera como deportista.

Empezó jugando para el CH Bratislava a finales de los años cincuenta. En este club eslovaco escribiría el principio de su historia, en la que a lo largo de su carrera le aseguró un brillante futuro a base de goles.

Con el conjunto de Bratislava conquistaría su primer título de Liga en 1959, ya cuando era internacional y se buscaba un hueco en el combinado nacional. Fue a partir de entonces cuando dio un espectacular giro a su carrera, convirtiéndose en uno de los mejores goleadores del denominado "viejo continente".
Ya en la campaña que precedió al Mundial de Chile, Scherer quedaría como máximo goleador de la liga checoslovaca, lo que le permitió contar con una plaza al Mundial de Chile, en el que dejó su huella como goleador.

Tras aquella fantástica campaña 1961\62, el atacante de origen germano se marcharía al vecino Slovnaft Bratislava, donde estaría tres temporadas para añadir 27 tantos más a su cuenta particular de los 72 que había logrado con su anterior equipo.

A mediados de los sesenta se uniría al Lokomotíva Košice, donde no tuvo la oportunidad de mostrarse tan goleador como se había acostumbrado. Sin embargo mejoró su versión en las filas del VSS Košice, para el que hizo 26 tantos.
Experimentó su primera salida al extranjero en 1969, para viajar a Francia y así fichar por el Nîmes Olympique, donde estuvo tres temporadas antes de retornar a su país natal, donde jugaría por última vez como miembro del Strojárne Martin.

Las cosas se complicaron para Scherer, quien en 1973 desertó de Checoslovaquia para instalarse en Francia. Considerada como una acción ilegal por el régimen comunista, las autoridades borraron su nombre de los registros y también las estadísticas oficiales. Scherer se refugiaría cerca de Nimes con su familia, donde se instaló de por vida.

Con tres goles, Adolf Scherer fue subcampeón del mundo con Checoslovaquia.

- Scherer hizo su vida en tierras galas, concluyendo su carrera deportiva en las filas del Olympique Avignonais en 1975 para después hacer sus pinitos en los banquillos, en los que no tuvo mucho éxito.

El resto de su historia lo narra su participación con aquella legendaria selección checoslovaca, para la que Adolf Scherer jugó un total de 36 partidos en hizo 22 goles. Entre 1958 y 1964 tuvo tiempo a participar en dos Copas del Mundo, con su espectacular colaboración en Chile 1962 -como subcampeón y goleador- y el tercer puesto logrado en la Eurocopa de Francia 1960.


jueves, 26 de marzo de 2020

De cerca: Roland Varga.



- Peligroso punta que de momento posee una corta trayectoria internacional con el equipo de su país, pero con el que ya ha hecho sus primeros goles. En el intento de que Hungría recupere ese prestigio competitivo perdido hace muchos años, jugadores como Roland Varga pueden tener la solución.
Juega por ambas bandas, aunque es diestro. Es un extremo veloz, buen asistente y muy goleador que tiene el don de regatear con facilidad a su adversario. Últimamente es un jugador que vive mucho del gol.

De momento, solamente salió de su país para jugar en Italia, donde ha representado a Brescia y Foggia. De estos equipos pasaría a jugar de nuevo en la liga húngara, primero para el Győr y actualmente para el Ferencváros.

Varga nació en Budapest (Hungría), el 23 de enero de 1990. Ya ha entrado en la etapa veterana del futbolista, la que yo considero que es la mejor para competir. Pero hay futbolistas que desde joven ya hacen un buen fútbol.
Eso le pasó a Roland, que al iniciarse en la academia deportiva del Magyar Testgyakorlók Köre, aunque anteriormente ya había obtenido formación en escuelas de fútbol base como el Goldball F.C. o la Academia Sándor Károly.

Pero el joven atacante no tendría tiempo a debutar en la llamada Nemzeti Bajnokság, ni siquiera a inferiores niveles. Entonces fue en Italia cuando convenció jugando un torneo juvenil con el MTK, ya en 2008.

Los ojeadores del Brescia pusieron sus ojos en la nueva perla magiar, a la cual atarían en febrero de 2008 al contemplar sus potentes disparos y esa facilidad anotadora que lució en los torneos. En principio, Roland pasaría a jugar para el equipo filial de la entidad lombarda.
Pese a que sorprendió mucho con el equipo reserva, el atacante contaría con muy pocas opciones para el primer equipo, llegando a disputar algún que otro amistoso y un partido oficial de la Serie B ante el Crotone.

Con apenas un cuarto de hora de protagonismo en el Brescia, su estancia en tierras italianas quedaría limitada a jugar en otros equipos a modo de préstamo con el fin de que se foguease debidamente, retornando a su país para jugar unos meses en el Újpest.

Tampoco tuvo mucho tiempo a demostrar su talento, por lo que la mejor opción sería colocarlo en un equipo más cercano para seguir más de cerca sus evoluciones. Es por ello que durante el curso 2010\11 se marchó cedido al Foggia.
Entonces compitió en la tercera división italiana, la cual le venía pequeña a la joven perla húngara, que disputó un total de 21 encuentros en los que marcó dos tantos. Aún así, volvería al Brescia para seguir sin opciones.

Roland se marcharía frustrado del país de la bota para retornar a su país natal. Allí ficharía por el Győr 19 de enero de 2012, firmando un contrato de tres meses y medio prorrogable al final del mismo.

Al fin debutaría en la Nemzeti Bajnokság, a la que sí se acostumbraría perfectamente desde sus primeras apariciones. Fue el gran revulsivo del técnico Atila Pintér, quien le acabaría concediendo la titularidad una vez arrancado el siguiente ejercicio, figurando como una de las estrellas del campeonato magiar.

Después de su frustrado paso por Italia, Varga consiguió debutar para Hungría al destacar con el Győr.

- En el Győr permaneció dos temporadas y media, ganándose la atención del Ferencváros, uno de los  mejores equipos de la liga húngara. A partir de entonces se ganaría un buen nombre en su país, lo que le serviría para establecerse en la selección nacional.

Anteriormente ya había jugado para los equipos menores de Hungría, pero fue su regreso al país lo que le permitió debutar con el equipo absoluto el 22 de mayo de 2014, en un partido ante Dinamarca en el Nagyerdei Stadion (Debrecen). Varga marcaría el segundo tanto de su equipo (2-2), el primero de los tres que lleva con la selección magiar.

miércoles, 25 de marzo de 2020

¿Te acuerdas de Dorinel Munteanu?



- Miembro de aquel poderoso equipo rumano que tanto dio que hablar durante los años noventa. Dorinel Ionel Munteanu fue uno de los líderes de aquel vestuario en el que sonaban las voces de Gica Hagi, Ilie Dumitrescu, Popescu, Prunea y un joven Florin Raducioiu.
Cierto es que Rumanía no pasaría de cuartos, pero aquel fútbol que desplegaba la escuadra balcánica era digno de admirar. Por nuestro protagonista pasaban muchos balones, su curtida experiencia era necesaria para hacer funcionar el motor de aquel sorprendente equipo.

Se experimentó en la liga alemana con equipos como el Köln o Wolfsburgo, aunque también pasó por el fútbol belga jugando para el Cercle Brujas. Munteanu nació el 25 de junio de 1968 en la ciudad de Grădinari (Rumanía).

Reconozco que era un jugador de mi gusto, un tipo con técnica, carácter y aguerrido, sin perder esa elegancia que define a los mejores futbolistas. Zurdo de pie, como me gustan a mi, solía desempeñarse como mediocentro defensivo, aunque en ocasiones le hemos visto jugar como extremo por la banda izquierda.
Fueron los inicios de una gran generación de futbolistas en la tierra de los Cárpatos. Dorinel hallaría un hueco en las filas del Metalul Bocșa, con el que debutaría bien joven en la llamada Divizia B, algo así como el segundo nivel rumano.

En 1987 pasó a jugar para el CSM Reșița, y posteriormente para equipos como Olt Scornicești e Inter de Sibiu, con los que ya adquirió una gran experiencia en el máximo nivel para poder triunfar en el Dinamo de Bucarest.

Munteanu se hizo grande antes de acudir a su primera cita mundialista, figurando entre los mejores jugadores del país a comienzos de los noventa, conquistando su primer título de liga en 1992 liderando la línea de medios del Dinamo.
Para el conjunto capitalino jugaría dos años, llegando a realizar un brillante papel sobre el verde anotando 27 tantos en 67 partidos. Antes de afrontar el Mundial, el mediocampista de Grădinari abandonaría su país para fichar por el Cercle Brujas.

En Bélgica no aguantaría ni dos temporadas. Tal era el prestigio alcanzado como internacional, que muchos fueron los clubes europeos que llamaron a su puerta, confirmando su incorporación inmediata al FC Köln.

A Colonia llegó en 1995, justo para debutar en la afamada Bundesliga el 12 de agosto, en un partido como local ante el Schalke 04 que se convirtió en una decepcionante derrota por 0-1. Munteanu jugaría de inicio, aunque no completaría los noventa minutos.
Pronto se amoldaría a la competición y se convertiría en titular, como estaba acostumbrado a hacer con su selección nacional, y pronto llegarían sus primeros goles en Alemania, como los que marcó ante Bayer Leverkusen, Saint Pauli y Eintracht de Frankfurt, a los últimos por partida doble.

Para el Köln jugaría durante tres campañas, hasta que el equipo descendió a la segunda división, momento en el que aprovechó para fichar por el Wolfsburgo, al que se incorporó en el mercado estival de finales de los noventa.

Ya había disputado su segunda y última Copa del Mundo cuando quería seguir cumpliendo en una competición tan exigente como la alemana, en la que Dorinel sumó un total de 198 partidos e hizo 22 goles. Su rendimiento fue de más a menos con la escuadra de los "Die Wölfe", abandonando tierras germanas para retornar a su Rumanía natal en 2003, cuando fichó de nuevo por el Steaua.

Dorinel Munteanu sigue siendo el jugador que más veces defendió a Rumanía, con 134 apariciones.

- Dorinel Munteanu ya no saldría de su país, completando su trayectoria profesional jugando para el Cluj, Arges Pitesti, Vaslui y Universitatea Cluj, donde colgó las botas para después iniciarse como entrenador.

Como ya he dicho, Munteanu fue uno de los grandes capitanes de aquella maravillosa selección rumana para la que disputó un total de 134 partidos, lo que le hace figurar como el jugador que más veces representó a su país y para el que anotó 16 goles. Participó en el sorprendente papel rumano del Mundial de USA 94, afrontando su última Copa del Mundo en Francia 98.

martes, 24 de marzo de 2020

De cerca: Grzegorz Krychowiak.



- Es, al menos en mi opinión, el futbolista polaco más completo de los últimos años. Así es como ha podido dar la talla en las ligas por las que ha pasado, pues además de haber triunfado en la Ekstraklasa, ha experimentado en competiciones como la francesa, la española o la inglesa.
A Grzegorz Krychowiak le conocemos en España gracias a su paso por el Sevilla F.C., a donde llegó tras destacar en las filas del Stade de Reims. Acabada su aventura en la Liga Española, el versátil defensor se marcharía al París Saint Germain.

Indiscutible en la selección polaca, ha participado en la Eurocopa de Francia 2016 y en la pasada edición mundialista de Rusia 2018. Es el líder de su selección y un jugador que aporta veteranía y experiencia.

Krychowiak jugó para el Sevilla F.C.
- Grzegorz (a saber como se pronuncia) nació en Gryfice (Polonia) el 29 de enero de 1990. Cuesta creer que a este magnífico futbolista no le gustase en absoluto el fútbol cuando era pequeño. Tenía doce años cuando, por insistencia de su hermano, acabó ingresando en su primer equipo para iniciar su preparación, la cual fue perfeccionando en el Orzeł Mrzeżyno.
En su búsqueda por el entusiasmo en cuanto a este deporte, Krychowiak probaría en casi todas las posiciones de campo, aunque como profesional destacaría de medio defensivo o como central. Condiciones físicas le sobran, ya que posee envergadura, presencia, músculo y bravura. Pero además es un jugador muy técnico, de esos que sirven buenas asistencias y además saben hacer goles.
También pasó por modestos equipos polacos como el Aki 94 Kołobrzeg o el Stal Szczecin. En el último estuvo hasta 2005, para después unirse al Arka Gdynia, donde consiguió erigirse como uno de los talentos más prometedores de su país. De esta manera sería descubierto por ojeadores del Girondins de Bordeaux, con el que completaría su formación juvenil, ya listo para dar el salto profesional.

Francis Gillot vio sus cualidades y no tardaría en convocarle para entrenar con el primer equipo. De ahí debutaría en la Ligue 1, en una visita al Toulouse el 17 de septiembre de 2011. Aquel día, Grzegorz tendría escasos minutos de juego en una derrota por 3-2 en Stade de Toulouse.
Con el Girondins tendría una oportunidad más en Liga, en la cual ejerció como titular en una nueva derrota como visitante ante el Nice. Sin mucho más que decir de su etapa en Burdeos, el centrocampista polaco sería declarado como transferible.

Se fue cedido al Stade de Reims, club que competía en la segunda división francesa por entonces y con el que logró ascender a la Ligue 1 para confirmar su gran momento de forma, jugando dos temporadas al máximo nivel.

Monchi Rodríguez, el director deportivo del Sevilla al que no se le escapa un crack, ya tenía buenos informes sobre el jugador, que hasta entonces había destacado en el Nantes y Reims. Por ello, la entidad andaluza se haría con los derechos federativos de Krychowiak, que en el verano de 2014 viajaría hacia España.
Se puso a las órdenes de Unai Emery y ya debutó como titular en la Supercopa de España ante el Real Madrid, que aquella tarde-noche del 12 de agosto se proclamaría campeón al imponerse por 2-0.

Poco después llegaría su primer partido en la Liga Española, en el partido inaugural con la visita del Valencia al Sánchez Pizjuán, que finalizó con empate a uno. Su rendimiento gustaría en Sevilla desde el principio.

Con el conjunto de Híspalis sería titular indiscutible, conquistando dos ediciones de la Europa League consecutivas en los dos años que defendió los colores sevillistas. En ese corto espacio de tiempo, el internacional polaco participaría en 58 partidos en los que marcó dos tantos, poniendo fin a su ciclo en España en julio de 2016.

Se iría al París Saint Germain, donde desde luego no le iría también como en sus anteriores etapas pese a coincidir con Emery, quien anteriormente había apostado por él. Krychowiak cumpliría su contrato prestado en otros equipos.

Krychowiak ha participado con Polonia en la Eurocopa de Francia 2016 y en el Mundial de Rusia 2018.

- Pasó por la Premier League efímeramente jugando para el West Bromwich Albion, con el que tuvo que lamentar un descenso de categoría. Después pondría rumbo a Rusia para jugar cedido en el Lokomotiv de Moscú, club que finalmente se haría con los derechos del internacional polaco.

Su trayectoria internacional se resume en 69 partidos y 4 goles por el momento. Krychowiak ha disputado la Eurocopa de Francia 2016, y posteriormente en el Mundial de Rusia 2018, en el que dejó un gol en tres partidos.

domingo, 22 de marzo de 2020

¿Te acuerdas de Petr Cech?



- Y llegamos al centenar de futbolistas eslavos con un portero muy especial, un grandísimo futbolista cuyo nombre ha figurado entre los más sonados de su generación, defendiendo el marco de equipos como Chelsea o Arsenal, entre otros.
Ha sido el guardián de la portería checa desde que tuvo una brillante actuación en el Mundial juvenil de Argentina 2001. Cogió el testigo de compañeros de posición como Jaromír Blažek, Luděk Mikloško o Antonín Kinský para participar en cuatro Eurocopas y el Mundial de Alemania 2006.

No hace falta hacer un gran ejercicio de memoria para recordar a Petr Cech (Čech). Es aquel espigado guardameta del particular gorro protector, cuya apariencia parecía más la de un nadador, ciclista o cualquier deportista que protege su cabeza con algo.

Petr Cech sin su característico casco. 
- En su caso, Petr lució esa protección craneal desde el 14 de octubre de 2006. Por entonces jugaba para el Chelsea, afrontando un partido de liga contra el Reading en el que saldría gravemente leso al chocar con la rodilla de Stephen Hunt. Aquel tremendo golpe casi le cuesta la vida y su proceso de recuperación tuvo que alargarse lo necesario para descartar una desgracia mayor. Tras aquella factura de cráneo, nos acostumbramos a ver a Cech luciendo un abultado gorro protector que le acompañaría el resto de su exitosa carrera.
Petr Cech nació el 20 de mayo de 1982 en la ciudad de Pilsen (República Checa). Hace unos meses que se retiró del fútbol, aunque a sus 37 años, perfectamente podría seguir en activo. Aún así, su extensa carrera deportiva ha durado más de dos décadas, en la que ha conquistado cuatro títulos de la Premier, la Europa League del 2013 y la inolvidable Champions League del año anterior. Sus 124 apariciones internacionales le permiten liderar el ránking de jugadores que más veces han vestido la camiseta de la selección checa.

En una Checoslovaquia aún unida, Cech ingresaría en el fútbol base del Škoda Plzeň a los siete años, un destacado club de su ciudad natal. En este equipo -conocido a día de hoy como Viktoria Plzeň- el joven Petr empezaría a jugar como u poderoso delantero de 1´96 centímetros de estatura.

Pero esa envergadura no tardaría en hacerla valer para ocupar el marco, ya que en su brusca modificación, el joven nuevo guardameta demostraría un especial talento para detener balones, aprovechando sus increíbles reflejos y esa admirable valentía de la que siempre hizo gala el de Pilsen.
Una lesión como jugador de campo es lo que le llevó a ser portero, ascendiendo peldaños por la cantera del equipo de su localidad durante toda una década , privado de poder debutar para el primer equipo por falta de oportunidades.

Conoció el fútbol profesional en la nueva competición checa, en la que dio sus primeros pasos como miembro del Chmel Blšany, donde permaneció dos temporadas antes de ser captado por los ojeadores del Sparta de Praga.

Tan solo necesitó una buena temporada para despertar el interés de los clubes más importantes, mientras iba dando sus primeros pasos con las secciones menores de la selección nacional. Con el equipo praguense, Petr jugaría 27 partidos en los que realizaría un fantástico papel, lo que le llevaría a jugar a la Ligue 1 francesa.
En la competición gala jugaría para el Rennes, cuya entidad se haría con su fichaje en julio de 2002. Entonces representó a la escuadra de Roazhon Park durante un par de años, donde confirmaría su estado de gracia antes de participar en la Euro de 2004.

Cech ya era un portero contrastado que en 2004 aterrizaría en Inglaterra para firmar por el Chelsea, para el que desde el principio figuraría como portero indiscutible a las órdenes del portugués José Mourinho.

Ya en su primer año conquistaría la Premier League, repitiendo título al año siguiente mas las ediciones de 2010 y 2015. En sus once años como jugador del club de Stamford Bridge siempre sería imprescindible, ganando títulos continentales como la Europa League de 2013 y la Champions del ejercicio anterior, su reto más bello como deportista.

Con 124 partidos, Petr Cech es el hombre que más veces representó a la selección checa.

- Tras su larga estancia en el Chelsea fichó por el Arsenal, donde prolongaría su carrera deportiva hasta 2019, momento en el que decidió retirarse con una curtida experiencia de 513 partidos en la afamada Premier League.

Es el jugador que más veces representó a la República Checa sobre el verde, con 124 partidos. A lo largo de su experiencia internacional, asistió a cuatro Eurocopas, las de Portugal 2004, Austria-Suiza 2008, Polonia-Ucrania 2012 y Francia 2016. Sin embargo, solamente participó en una Copa del Mundo, la de Alemania 2006.

jueves, 19 de marzo de 2020

De cerca: Vasil Bozhikov.



- Es de lo más experimentado que hay en la selección de Bulgaria, un zaguero de la vieja escuela que ya ha participado en 26 partidos internacionales. Él y Petar Zanev son los que aportan la veteranía al equipo nacional.
A nivel de clubes ha competido en ligas extranjeras como la turca o la eslovaca, completando su currículo en equipos como Litex Lovech, Kasımpaşa y Slovan de Bratislava, equipo donde se halla ahora.

Su nombre es Vasil Georgiev Bozhikov (Васил Божиков) y nació el 2 de junio de 1988 en Gotse Delchev (Bulgaria ). Se podría decir que es uno de los últimos testigos del mejor fútbol búlgaro, perteneciente a una generación que vivió la decadencia de este deporte en su país.

Comenzó compitiendo en el tercer nivel búlgaro con el Gigant Saedinenie. Anteriormente había recibido formación en modestos clubes como el Pirin Gotse Delchev, de donde pasó a la prestigiosa cantera del Botev Plovdiv. Allí daría sus pasos como joven promesa nacional.
Pero fue con el club de Plovdiv donde conoció el fútbol en su modo profesional. Vasil fue descubierto como un centrocampista muy físico que con el paso del tiempo acabaría retrasando su posición a defensa central que a veces es utilizado por el carril izquierdo, donde rinde como lateral de retaguardia.

Bozhikov jugaría dos años para el  Gigant Saedinenie, con el que dejó buenas sensaciones y unos números de 67 partidos y 3 goles. Fue así como los directivos del Minyor Pernik se interesaron por el joven talento de Gotse Delchev.

En febrero de 2009 firmaría su contrato con la empresa de Pernik, para el que previamente había realizado unas pruebas que superó con éxito. De esta manera, Bozhikov ya se preparaba para debutar en la categoría máxima de Bulgaria.
Dicho estreno llegaría el 16 de marzo de 2009, en un partido contra el Litex Lovech, equipo que precisamente sería su siguiente destino. Como locales, el conjunto minero no pasaría del empate a cero, mientras que Vasil dejaría muy buenas sensaciones en su debut.

Con el Minyor Pernik jugaría un total de setenta partidos en las dos temporadas que permaneció en el club. Ya había realizado unas pruebas con el Genk belga, pero finalmente continuaría jugando en su país natal.

Fichó por el Litex Lovech a primeros de diciembre de 2011, para el que debutó cuatro meses después, en un partido con el Ludogorets Razgrad como local, de donde sacaron un empate a uno. El zaguero completaría los noventa minutos del encuentro.
En la escuadra de Litex Commerce estuvo tres temporadas a muy buen nivel, disputando casi un centenar de partidos en los que dejó un tanto. Gracias a su rendimiento, la selección nacional de Bulgaria le llamaría para entrenar con el primer equipo.

Bozhikov abandonaría su país por vez primera para incorporarse al Kasımpaşa, un equipo de la liga turca que pagaría 400.000 euros para hacerse con los servicios del defensa internacional. En la competición turca tendría 23 apariciones, sin llegar a cumplir con su contrato de dos años prorrogables debido a que contó con nuevas ofertas tras no amoldarse a la competición otomana.

Vasil Bozhikov lleva 26 partidos y dos tantos con el equipo nacional de Bulgaria.

- El siguiente destino de Vasil Bozhikov sería Eslovaquia, donde le aguardaba el Slovan de Bratislava para firmar en el verano de 2017. Parece que en la liga eslovaca le va mejor, pues es indiscutible y ya acumula 63 partidos y dos goles.

Destacó con el equipo Sub-21 de Bulgaria y tuvo que esperar unos años para servir al equipo absoluto, con el que debutó el 26 de marzo de 2016, en una victoria frente a Portugal por 1-0. Actualmente lleva 26 partidos y dos tantos, aunque todavía no sabe lo que es competir en grandes torneos con la selección búlgara.

De cerca: Ladislav Krejčí.

- Es uno de los descubrimientos recientes en LaLiga, defensor del Girona F.C. que tiene un talento incuestionable. Krejcí desarrolló unos in...